"El Titánic", un grandioso, costoso y formidable transatlántico, de admirable diseño; estas fueron algunas de las razones, por las que los pasajeros se sintieron seguros durante su viaje inaugural en 1912, hasta que fue anegado, al impactar con un iceberg.

Hubo testigos que escucharon la voz de un alto mando de la nave decir: "¡esta construcción no lo hunde ni Dios!"; lamentable e ignorante conjetura, que condujo a la inevitable muerte de cientos de personas inocentes. Pero, ¿quién de los que osó burlarse o maldecir a Dios o a Jesucristo, vivió mucho tiempo después de su atrevida y oscura actitud?

Números 11:1 Reina-Valera 1960

1 Aconteció que el pueblo se quejó a oídos de Jehová; y lo oyó Jehová, y ardió su ira, y se encendió en ellos fuego de Jehová, y consumió uno de los extremos del campamento.

1 Corintios 10:10

10 Ni murmuréis, como algunos de ellos murmuraron, y perecieron por el destructor.

Proverbios 19:3

3 La insensatez del hombre tuerce su camino,
Y luego contra Jehová se irrita su corazón.

Proverbios 18:21

21 La muerte y la vida están en poder de la lengua,
Y el que la ama comerá de sus frutos.