En su tiempo, el mejor sicólogo del Brasil, solía decir de manera condicionada a sus pacientes y acompañantes: "si creen en Jesucristo como el Hijo de Dios, pueden pasar"; ¿cómo es posible que el ejercicio de una profesión, dependa de alguien que vivió hace miles de años? Dirán muchos. Y es que no solo este tipo de labor, también todas las actividades cotidianas, deberían contar con el apoyo y la bendición divinos; y más, cuando se trata de dificultades en la mente y emociones.
Algunos se burlaban de un creyente porque por un pequeño dulce, elevó una oración de gratitud al Dios de los cielos, ¿cuánto más serán las inconformes inquietudes al tratarse de un trabajo ofrecido al Creador?
2 Corintios 3:15-17 Reina-Valera 1960
15 Y aun hasta el día de hoy, cuando se lee a Moisés, el velo está puesto sobre el corazón de ellos.
16 Pero cuando se conviertan al Señor, el velo se quitará.
17 Porque el Señor es el Espíritu; y donde está el Espíritu del Señor, allí hay libertad.
Romanos 11:36
36 Porque de él, y por él, y para él, son todas las cosas. A él sea la gloria por los siglos. Amén.