¿Hacia dónde mira normalmente el ser humano para sentirse seguro consigo mismo o con su entorno? Generalmente observa sus logros intelectuales, apariencia y posesiones; porque es, lo que supuestamente, le da un lugar o posición en medio de cierta comunidad o sociedad. La seguridad y la felicidad, se encuentran ausentes de lo que se pueda palpar o comprobar por medios físicos; alguien expresó: “no eres lo que tienes, sino, lo que eres”. Por tal motivo, cuando llegan el caos, las dificultades o la tristeza, este
tipo de “seguridad”, nunca dará paz y refugio.
Salmos 121:1-2 Reina-Valera 1960
1 Alzaré mis ojos a los montes; ¿De dónde vendrá mi socorro?
2 Mi socorro viene de Jehová, Que hizo los cielos y la tierra.
2 Corintios 4:18
18 no mirando nosotros las cosas que se ven, sino las que no se ven; pues las cosas que se ven son temporales, pero las que no se ven son eternas.